“Me jalaron del cabello y golpearon en la espalda solo por decir que era personal médico”. Así reflejó Sonia Escobar Tames, directora del centro de Salud Arbieto, el mal momento que pasó ayer cuando intentó pasar el bloqueo en K’ara K’ara, zona sur de Cochabamba.
Con la voz nerviosa y entrecortada dijo que ella iba en la moto con su hermano cuando fueron interceptados por bloqueadores de grupos simpatizantes al Movimiento Al Socialismo, MAS, que cerraron la avenida Petrolera exigiendo que las elecciones se realicen el 6 de septiembre.
“Les mostré mi credencial de médico creyendo que me iban a dejar pasar, pero se acercaron y empezaron a golpear a mi hermano. Le dieron patadas y ahora está cojeando. A mí me jalaron del cabello y recibí maltrato en mi espalda. Rompieron mis lentes”.
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Explicó que quiso reportar su situación a su coordinador de red de salud, pero la acción fue mal interpretada por los bloqueadores quienes quitaron el móvil para revisar si había hecho alguna grabación.
El hermano llevaba a Escóbar hasta más allá de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos donde una ambulancia esperaba al personal de salud para llevarles hasta Arbieto, a 39 kilómetros de la ciudad de Cochabamba.
Denunción que entre sus agresores estaban personas ebrias. La autoridad señaló que presentará las denuncias pertinentes ante el Sindicato de Ramas Médicas Públicas (Sirmes) y el Colegio Médico.
El Sirmes, ayer denunció a la comunidad internacional, la crítica emergencia en que se encuentra el Sistema Médico en Bolivia y el personal médico a partir de bloqueos a las principales vías de abastecimiento de insumos y medicamentos.
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