Luis Fernando Humérez, considerado “testigo clave” en el caso de los 170 respiradores españoles comprados con supuesto sobreprecio, se benefició el miércoles con la detención domiciliaria, informó su abogado Marcelo Rollano.
El jurista indicó que una jueza en suplencia tomó esta decisión en la audiencia de apelación, a raíz de que Humérez cumplió el tiempo de seis meses con detención preventiva en el penal de San Pedro, por el caso de los respiradores españoles.
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Humérez se presentó en mayo como “testigo clave” en este caso, pero luego fue aprehendido por la Justicia y fue enviado a un penal con detención preventiva. Desde la cárcel, Humérez denunció que fue secuestrado al momento de su detención y que había declarado en un inicio bajo presión.
No obstante, la nueva determinación ya fue apelada por la Fiscalía, admitió Rollano, “bajo el argumento de que se solicitó ampliar el tiempo de la detención preventiva de su defendido”, indica un reporte de Erbol.
Humérez debe cumplir medidas sustitutivas como el arraigo, además de presentar dos garantes personales que, en caso de una eventual fuga, puedan presentarse ante las autoridades.
En mayo se destapó el caso de los 170 respiradores españoles adquiridos con supuesto sobreprecio que se habría pagado por estos equipos, una acción que significó un daño económico al Estados de aproximadamente tres millones de dólares. Bolivia adquirió esos equipos para combatir al coronavirus durante la pandemia.
El 1 de septiembre, el exministro de Salud, Aníbal Cruz, reveló que mientras él estaba en el cargo, el empresario Humérez intentó acercarse al gobierno de Jeanine Añez con apoyo para su campaña electoral, con la barra brava de Wilstermann, denominada Los Gurkas.
Página Siete
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