Pasaron cuatro años del accidente aéreo de la empresa aérea boliviana LaMia, en Colombia. La nave transportaba al plantel brasileño del Chapecoense. Entonces fallecieron 71 de los 77 pasajeros. El expresidente de la entidad deportiva, Plinio David De Nes, anunció este sábado a Infobae que la causa judicial se resolverá en alrededor de 10 años porque los trámites “llevan mucho tiempo”.
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El equipo brasileño viajaba a Medellín, Colombia, para disputar el partido de ida de la final de la Copa Sudamericana contra el Atlético Nacional cuando el avión que lo transportaba se quedó sin combustible a pocos kilómetros del aeropuerto de Rionegro y se estrelló. Únicamente sobrevivieron tres jugadores de la delegación, Alan Ruschel, Jackson Follman y Helio Neto, un periodista, Rafael Henzel, que un año y medio después murió, y dos miembros de la tripulación, Ximena Suarez y Erwin Tummuri.
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Una investigación realizada por la Autoridad Aeronáutica de Colombia concluyó que el siniestro “se produjo por agotamiento de combustible del avión por consecuencia de una inapropiada gestión de riesgo de la empresa LaMia”, informó el coronel Miguel Camacho, jefe del grupo de investigación de accidentes de la entidad, en 2018.
Plinio David De Nes afirmó que “la tramitación continúa un poco demorada tanto en Brasil como en el exterior. Aún quedan muchas cosas por conocer. No soy abogado, pero en mi opinión, la causa se resolverá en seis, ocho, diez años” y aseguró que “un accidente aéreo es algo que, lamentablemente, lleva mucho tiempo para una solución completa”.
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La investigación colombiana libera de cualquier responsabilidad a los controladores aéreos de Rionegro, según reporte de AFP y señala que “las primeras investigaciones revelaron que el aparato iba corto de combustible y con sobrepeso. El fallecido piloto fue responsabilizado y una decena de funcionarios de la aerolínea y del Estado están presos en Bolivia”.
Hoy, el mundo del fútbol recuerda la tragedia y a la memoria viene el dolor de los familiares por la pérdida de sus seres queridos, en una trágica noche que quedará marcada en la historia, recuerda el diario colombiano El Tiempo. Chapecoense tiene una nueva vida a pesar de haber descendido a la segunda categoría hace un año en Brasil.
Tomado de Página Siete
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