EFE
El estado de Sao Paulo, el más poblado de Brasil con unos 44 millones de habitantes, volverá a endurecer las medidas restrictivas para contener el avance del coronavirus a partir de esta semana en toda la región, anunció este lunes el gobernador paulista, Joao Doria.
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«Con un claro aumento de la inestabilidad de la pandemia, decidimos que el 100 % del estado de Sao Paulo va a regresar a la fase amarilla» del plan de contención del coronavirus, afirmó en una rueda de prensa el gobernador.
Doria explicó que el retroceso «no cierra» comercios, bares, restaurantes, gimnasios y otros, pero restringe el horario de funcionamiento, limita el aforo a un 40 % de la capacidad total y determina el cierre de establecimientos nocturnos a las 22 horas.
El endurecimiento de las medidas restrictivas fueron anunciadas en momentos en que Brasil vive un rebrote de la covid-19 y un aumento de casos, muertes y hospitalizaciones por la enfermedad, tras presentar por varias semanas consecutivas una clara tendencia de ralentización en todo el país.
Hasta ahora, un 76 % del estado de Sao Paulo, que en números absolutos concentra el mayor número de infectados (1,24 millones) y muertes (42.076) del país, se encontraba en la llamada fase verde, que es la penúltima de las cinco etapas que componen el plan de contención regional, por lo que deberán retroceder una etapa.
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Mientras, el 24 % restante ya estaba y deberá permanecer en la fase amarilla. Doria reconoció que «el país está exhausto de aislamientos y de medidas de contención», pero recalcó que hay que «insistir en las medidas de prevención y en los cuidados hasta la llegada de una vacuna» contra la covid-19.
«Es una medida de prudencia que estamos tomando para mejorar el control de la pandemia», aseguró el gobernador, quien descartó, sin embargo, la implementación de un confinamiento absoluto.
Doria también instó al Gobierno central del presidente Jair Bolsonaro y al Ministerio de Salud a presentar un plan de inmunización nacional para cuando una vacuna contra el coronavirus esté disponible.
«Comprendemos que ante las circunstancias cabe al Gobierno federal y al Ministerio de Salud presentar inmediatamente a la población brasileña cuál es su programa de inmunización», recalcó.
Con el retroceso en el plan de contención y el agravamiento de la pandemia, la Gobernación volverá a realizar semanalmente la evaluación de la situación de la enfermedad en el estado, y no cada 28 días como venía haciendo.
El anuncio de las nuevas restricciones se produce un día después de la segunda vuelta de las elecciones municipales, celebradas este domingo y en las que el alcalde Bruno Covas, del mismo partido de Doria, fue reelegido.
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Según los expertos, las campañas electorales de las últimas semanas para los comicios municipales, así como la primera jornada de votación que fue celebrada el pasado día 15 de noviembre, han sido uno de los focos propagadores del virus en este último mes.
Los especialistas temen además que la mayor circulación de personas este domingo, cuando millones de brasileños fueron convocados para ir a las urnas en 57 ciudades del país, también pueda producir una aceleración en el ritmo de contagio en los próximos días.
Con una población de unos 212 millones de habitantes, Brasil acumula hasta el momento 172.833 muertes y 6,3 millones de infectados por el nuevo coronavirus, lo que lo sitúa como uno de los países más afectados por la pandemia, al lado de Estados Unidos e India.
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