El Gobierno canaliza créditos para las micro, pequeñas y grandes empresas, que van desde los 250 mil hasta los cinco millones de bolivianos y a una tasa de interés de 0,5% para reactivar e impulsar la producción nacional.
Los recursos corresponden a dos fideicomisos con 911 millones de bolivianos y que se dispondrán a través del Banco Unión y del Banco de Desarrollo Productivo (BDP).
El presidente Luis Arce entregó ayer a productores los primeros créditos de los fideicomisos para la Reactivación y Desarrollo de la Industria Nacional (Firedin) con Sustitución de Importaciones (SI Bolivia).
“La preocupación que tenemos está relacionada al coronavirus, pero también está relacionada al tema económico”, dijo.
El ministro de Desarrollo Productivo, Néstor Huanca, explicó que el pago de las cuotas de los créditos estará en función al ciclo productivo y puede ser mensual, bimestral, trimestral, semestral, anual o personalizado.
“Es un incentivo financiero importante, ya que las condiciones son muy ventajosas, el interés es del 0,5% anual fijo para el financiamiento de capital de operaciones o inversiones de la micro, pequeña, mediana y gran empresa. Hay diferentes modalidades para las garantías”, dijo.
Explicó que los montos máximos de crédito son de entre tres y cinco millones de bolivianos para la gran empresa; entre uno y dos millones para la mediana empresa; para la pequeña va desde los 500 mil hasta los 700 mil , y para la microempresa será de 250 mil bolivianos. Al respecto, el presidente de la Confederación Nacional de la Micro y Pequeña Empresa, Néstor Conde, observó que para acceder a los recursos los requisitos no son flexibles, ya que se exige contar con número de identificación tributaria (NIT).
“Tener NIT, estar inscrito en Promueve Bolivia y otros, es con el fin de formalizarnos, pero por la pandemia hay empresas que ya no están operando, por lo tanto, ya no son formales. Creemos que con estas disposiciones nos están poniendo trabas para no acceder a estos créditos”, añadió.
Por su parte, el presidente de la Confederación de Microempresarios, Néstor Sandy, mencionó que el registro del NIT como una dificultad se le hizo notar al ministro Huanca y que se debería considerar otros requisitos en la reglamentación del Decreto Supremo 4424, que autoriza la constitución de fideicomisos.
“Esperemos que la reglamentación sea lo más flexible posible, porque no va a servir de nada que se lance este tipo de oportunidades cuando estamos con la soga en el cuello. Por ejemplo, el tener NIT significa que todos tenemos que ser formales para acceder a este crédito que tiene una tasa del 0,5%”, manifestó Sandy.
El sector exige que el Gobierno obligue a las entidades públicas a que compren productos nacionales, para que en un lapso de entre uno y dos años las microempresas se reactiven y formalicen.
El gerente general de la CNC, Gustavo Jáuregui, afirmó: “Vemos que es un primer paso, creemos que es importante trabajar con el sector empresarial. El Gobierno tiene que entender que el sector productivo no solo es de la industria manufacturera, sino que está el de los servicios o turismo, que es uno de los más golpeados por la Covid-19, por lo tanto, los créditos también debían considerarse para ellos”.
Síguenos en FACEBOOK
Citó que el monto de los 911 millones de bolivianos que se canaliza es insuficiente, porque la CNC en su momento había sugerido que para reactivar la economía se requieren 4.000 millones de dólares, por el shock que se tuvo en 2020.
Industria afirma que es alivio parcial y propone siete medidas
La Cámara Nacional de Industrias (CNI) considera que los fideicomisos estatales son un “alivio parcial” para reanimar el aparato productivo y que se requieren otras medidas.
El sector demanda un conjunto de políticas públicas integrales de lucha contra el contrabando, en el ámbito laboral, tributario, comercio exterior, apertura de mercados, de financiamiento y de inversión que permitan la reactivación de la industria que actualmente se encuentra en crisis.
“La política para sustituir importaciones debe contemplar no sólo financiamiento, sino tener como principal factor la lucha al contrabando que moviliza alrededor de 2.300 millones de dólares por año, de lo contrario los resultados serán escasos o nulos”, sostuvo el presidente de la CNI, Ibo Blazicevic.
Afirmó que en 2020 las importaciones en volumen aumentaron en 4%, lo que significa que se está generando un proceso gradual de sustitución de la producción Hecho en Bolivia, en tiempos de la pandemia de la Covid -19.
Según la CNI, es fundamental que en el acceso al crédito se planteen garantías estatales para quien lo tome y no haya barreras burocráticas tanto en el Banco de Desarrollo Productivo (BDP) como en el Banco Unión.
“En consecuencia, los fideicomisos de 911 millones de bolivianos para créditos con un plazo de hasta 10 años, con tasa de interés de 0,5% anual y con garantías diversas, es un alivio parcial”, puntualizó.
La CNI propuso al Gobierno siete medidas de corto plazo para reactivar la economía: modernizar normas laborales y modalidades de trabajo; reestructurar el sistema impositivo para reducir la carga fiscal en el sector industrial y aumentar su competitividad.
Además de abrir nuevos mercados; reducir trámites y la burocracia pública; impulsar la compra de bienes y servicios Hecho en Bolivia; crear un fondo de créditos y garantías estatales para las empresas, y luchar contra el contrabando.
El Gobierno canaliza créditos para las micro, pequeñas y grandes empresas, que van desde los 250 mil hasta los cinco millones de bolivianos y a una tasa de interés de 0,5% para reactivar e impulsar la producción nacional.
Los recursos corresponden a dos fideicomisos con 911 millones de bolivianos y que se dispondrán a través del Banco Unión y del Banco de Desarrollo Productivo (BDP).
El presidente Luis Arce entregó ayer a productores los primeros créditos de los fideicomisos para la Reactivación y Desarrollo de la Industria Nacional (Firedin) con Sustitución de Importaciones (SI Bolivia).
“La preocupación que tenemos está relacionada al coronavirus, pero también está relacionada al tema económico”, dijo.
El ministro de Desarrollo Productivo, Néstor Huanca, explicó que el pago de las cuotas de los créditos estará en función al ciclo productivo y puede ser mensual, bimestral, trimestral, semestral, anual o personalizado.
“Es un incentivo financiero importante, ya que las condiciones son muy ventajosas, el interés es del 0,5% anual fijo para el financiamiento de capital de operaciones o inversiones de la micro, pequeña, mediana y gran empresa. Hay diferentes modalidades para las garantías”, dijo.
Explicó que los montos máximos de crédito son de entre tres y cinco millones de bolivianos para la gran empresa; entre uno y dos millones para la mediana empresa; para la pequeña va desde los 500 mil hasta los 700 mil , y para la microempresa será de 250 mil bolivianos. Al respecto, el presidente de la Confederación Nacional de la Micro y Pequeña Empresa, Néstor Conde, observó que para acceder a los recursos los requisitos no son flexibles, ya que se exige contar con número de identificación tributaria (NIT).
“Tener NIT, estar inscrito en Promueve Bolivia y otros, es con el fin de formalizarnos, pero por la pandemia hay empresas que ya no están operando, por lo tanto, ya no son formales. Creemos que con estas disposiciones nos están poniendo trabas para no acceder a estos créditos”, añadió.
Por su parte, el presidente de la Confederación de Microempresarios, Néstor Sandy, mencionó que el registro del NIT como una dificultad se le hizo notar al ministro Huanca y que se debería considerar otros requisitos en la reglamentación del Decreto Supremo 4424, que autoriza la constitución de fideicomisos.
“Esperemos que la reglamentación sea lo más flexible posible, porque no va a servir de nada que se lance este tipo de oportunidades cuando estamos con la soga en el cuello. Por ejemplo, el tener NIT significa que todos tenemos que ser formales para acceder a este crédito que tiene una tasa del 0,5%”, manifestó Sandy.
El sector exige que el Gobierno obligue a las entidades públicas a que compren productos nacionales, para que en un lapso de entre uno y dos años las microempresas se reactiven y formalicen.
El gerente general de la CNC, Gustavo Jáuregui, afirmó: “Vemos que es un primer paso, creemos que es importante trabajar con el sector empresarial. El Gobierno tiene que entender que el sector productivo no solo es de la industria manufacturera, sino que está el de los servicios o turismo, que es uno de los más golpeados por la Covid-19, por lo tanto, los créditos también debían considerarse para ellos”.
Citó que el monto de los 911 millones de bolivianos que se canaliza es insuficiente, porque la CNC en su momento había sugerido que para reactivar la economía se requieren 4.000 millones de dólares, por el shock que se tuvo en 2020.
Industria afirma que es alivio parcial y propone siete medidas
La Cámara Nacional de Industrias (CNI) considera que los fideicomisos estatales son un “alivio parcial” para reanimar el aparato productivo y que se requieren otras medidas.
El sector demanda un conjunto de políticas públicas integrales de lucha contra el contrabando, en el ámbito laboral, tributario, comercio exterior, apertura de mercados, de financiamiento y de inversión que permitan la reactivación de la industria que actualmente se encuentra en crisis.
“La política para sustituir importaciones debe contemplar no sólo financiamiento, sino tener como principal factor la lucha al contrabando que moviliza alrededor de 2.300 millones de dólares por año, de lo contrario los resultados serán escasos o nulos”, sostuvo el presidente de la CNI, Ibo Blazicevic.
Afirmó que en 2020 las importaciones en volumen aumentaron en 4%, lo que significa que se está generando un proceso gradual de sustitución de la producción Hecho en Bolivia, en tiempos de la pandemia de la Covid -19.
Según la CNI, es fundamental que en el acceso al crédito se planteen garantías estatales para quien lo tome y no haya barreras burocráticas tanto en el Banco de Desarrollo Productivo (BDP) como en el Banco Unión.
“En consecuencia, los fideicomisos de 911 millones de bolivianos para créditos con un plazo de hasta 10 años, con tasa de interés de 0,5% anual y con garantías diversas, es un alivio parcial”, puntualizó.
La CNI propuso al Gobierno siete medidas de corto plazo para reactivar la economía: modernizar normas laborales y modalidades de trabajo; reestructurar el sistema impositivo para reducir la carga fiscal en el sector industrial y aumentar su competitividad.
Además de abrir nuevos mercados; reducir trámites y la burocracia pública; impulsar la compra de bienes y servicios Hecho en Bolivia; crear un fondo de créditos y garantías estatales para las empresas, y luchar contra el contrabando.
Pagina Siete
Comentarios