El director regional de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para Europa, Hans Henri Kluge, ha confirmado que desde el inicio de la guerra en Ucrania se han reportado un total de 226 ataques a contra la atención sanitaria del país, dejando al menos 75 muertos y 59 heridos.
Según ha detallado Kluge en un comunicado, esto supone que desde el inicio de la ofensiva rusa contra Ucrania a finales de febrero se han registrado una media de casi tres ataques al día.
Además, dos tercios de todos los ataques contra centros sanitarios en lo que va de año confirmados por la OMS se han dado en Ucrania en el marco de la guerra. “Estos ataques no son justificables, nunca están bien y deben investigarse”, ha remarcado.
“Es un insulto a la dedicación e integridad de los trabajadores de la salud en todas partes que continúen impunes. Ningún profesional de la salud debería tener que brindar atención médica al filo de la navaja”, ha lamentado.
En este sentido, ha puesto en valor el trabajo de los profesionales de la salud de Ucrania, a quienes ha ensalzado su “coraje”, “valentía” y “dedicación”. “Habéis hecho lo imposible: os mantenéis firmes y salváis vidas”, ha remarcado.
Kluge se ha desplazado a Ucrania por tercera vez en lo que va del año y, en el marco de su visita, ha conocido a algunos de los sanitarios del país y ha escuchado de primera mano algunas de sus historias y los desafíos profesionales a los que se enfrentan.
Además ha coincidido con el ministro de Salud, Viktor Liashko, en la región de Chernigov, donde ha visitado “varios hospitales e instalaciones de salud” y ha hablado con profesionales y pacientes.
Pero más allá de esto, el director regional de la OMS ha confirmado que su visita tiene como objetivo también el conocer las “medidas adicionales” que se requieren sobre el terreno en un país donde uno de cada tres pacientes de enfermedad crónica lucha por acceder a medicamentos y donde la tasa de vacunación de polio y sarampión se mantiene por debajo de la cobertura recomendada del 95 por ciento.
“Por lo que vi ayer mientras visitaba Chernigov, los servicios de salud mental deben ampliarse aún más para llegar a las comunidades. Según la OMS, es probable que 1 de cada 5 personas en zonas de conflicto desarrolle problemas graves de salud mental. Más de 16 000 personas en Ucrania con problemas de salud mental de moderados a graves se enfrentan a la escasez de medicamentos esenciales”, ha incidido.
Asimismo, la violencia sexual es otro de los aspectos más delicados en Ucrania, pues, según Naciones Unidas, esta es “una grave amenaza para la mayoría de mujeres y niñas en las zonas de conflicto”. Sobre este asunto, Kluge ha reconocido sentirse “profundamente preocupado”.
En esta línea, el representante de la OMS ha apuntado que el organismo busca paliar un posible brote de cólera en las áreas ocupadas por Rusia debido a los daños que han sufrido las infraestructuras de agua y saneamiento.
“La paz es una condición previa para la salud. Todos nuestros esfuerzos por reconstruir y reformar podrían fracasar sin paz. Me gustaría reiterar el llamamiento del secretario general de Naciones Unidas (António Guterres) a ‘un alto el fuego inmediato y al fin de la guerra de Rusia en Ucrania’”, ha zanjado Kluge.
Europa Press
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