Un lamentable caso de violencia intrafamiliar con resultados trágicos conmocionó al tranquilo pueblo de Colesville, en el estado de Nueva York, Estados Unidos. Un hombre de 26 años, identificado como Patrick D. Proefriedt, atacó brutalmente a su esposa con una ballesta después de una acalorada discusión, cobrándose la vida de su hija de tan solo tres meses de edad, quien se encontraba en los brazos de su madre en el momento del ataque.
Según informaron las autoridades, el trágico suceso ocurrió cuando Proefriedt, sin considerar las terribles consecuencias de sus actos, accionó el arma durante la discusión con su pareja. La punta de la flecha de la ballesta impactó a la indefensa bebé en la parte superior de su torso, atravesándola y saliendo cerca de la axila, alcanzando también a la madre que intentaba protegerla en vano.

Tras cometer el acto criminal, el agresor aparentemente intentó impedir que su esposa pidiera ayuda al tratar de bloquear la puerta, para luego huir del lugar en una camioneta roja. Afortunadamente, la mujer herida logró llamar a los servicios de emergencia, quienes acudieron rápidamente al escenario de la tragedia.
Las autoridades acordonaron la zona y lograron asegurar la ballesta utilizada en el ataque. En cuanto a la bebé, identificada como Eleanor M. Carey, los paramédicos intentaron brindarle los primeros auxilios, pero debido a la gravedad de su herida, lamentablemente no pudieron salvarle la vida y fue declarada muerta en el lugar de los hechos. La madre de la pequeña fue trasladada a un centro médico donde recibió atención médica y tratamiento para sus heridas.
Las fuerzas de seguridad locales unieron sus esfuerzos para capturar al responsable del homicidio, estableciendo un perímetro de búsqueda alrededor del área afectada. Con la ayuda de drones, la policía logró localizar a Proefriedt, quien se ocultaba en un bosque a menos de una milla de distancia de la propiedad, después de que su vehículo quedara atascado en el barro.
El agresor fue detenido y enfrenta cargos por asesinato e intento de asesinato en segundo grado, así como por desacato criminal en primer grado. Según los registros judiciales, Proefriedt tenía antecedentes de violencia intrafamiliar contra su víctima, lo que había llevado a la emisión de una orden de protección activa que le prohibía acercarse a la mujer.


AGENCIAS

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