La expresidenta Jeanine Añez se declaró este miércoles en huelga de hambre en la cárcel de Miraflores, un día antes de que inicie su juicio por el caso denominado “golpe de Estado II”.
“Es hasta las últimas consecuencias. Dios quiera que las autoridades, tanto de Justicia como el Gobierno, se pongan una mano al pecho y vean que primero hay que hay que priorizar la vida de una mujer, de una madre dejando a un lado la política y la venganza”, dijo Carolina Ribera, hija de Añez.
Añez escribió una carta para anunciar su determinación. “Tomo una de las decisiones más duras de mi vida, hoy ingreso en huelga de hambre, estoy desesperada de ver un país sin justicia ni ley”, dice al texto.
La exmandataria señaló que busca mostrar a la comunidad internacional que la justicia en Bolivia hoy es de Evo Morales y Luis Arce.
“Estoy enferma pero mis últimas fuerzas las dedicaré para mostrar al país y al mundo que estos machos del poder que no podrán borrar de la historia, lo que cometieron fraude, fueron encontrados y renunciaron escapando al país”, afirmó.
A sus hijos, Añez pidió que amen y valoren a Bolivia, pero sobre todo luchen por la libertad y que ningún tirano se las quite.
“Pido perdón a Dios por esta acción contra mi ser, pero espero pueda él darme fuerza para entender su designio y que mi patria no olvide su historia”, agrega la carta.
Carolina dijo que está muy preocupada por las consecuencias que tenga la huelga de hambre para su madre.
“Es su último grito de auxilio y le expresó a toda Bolivia que nos apoye, que estén con nosotros, que nos muestran su solidaridad”, dijo Carolina Ribera, hija de Añez, quien dio a conocer la información.
Pidió que el juicio se haga de manera presencial y que las audiencias sean públicas. Rechazó que el proceso se haga de manera virtual.
Ribera llamó a que haya un juicio justo. “No estamos pidiendo impunidad, estamos pudendo que se respete el debido proceso y que los jueces, fiscales y vocales actúen de manera imparcial”, agregó.
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