Los familiares y amigos de los cuatro acusados por el incendio a la sede de la Federación Única de Campesinos en Santa Cruz, que fueron enviados a la cárcel un día antes de que se levante el paro, llegaron hasta puertas de la casa de Rómulo Calvo exigiendo que el presidente cívico les dé explicaciones sobre cómo apoyarán a los detenidos.
Los cuatro detenidos habían sido liberados en primera instancia junto a otras seis personas con medidas sustitutivas a la detención preventiva, pero la Fiscalía apeló la determinación judicial y en una audiencia de medidas cautelares realizada el viernes pasado se ordenó su reclusión.
“Estamos totalmente abandonados y nuestro miedo es que luego ordenen su traslado a otras ciudades”, señaló uno de los familiares de los detenidos por el caso de la quema en la sede campesina.
Los cuatro imputados por la Fiscalía son: Álvaro Choque Pérez, Sebastián Méndez Sevilla, Isidro Zelaya y Luis Mateo Hurtado, que deben estar en la cárcel por un periodo de 30 días, mientras la Fiscalía investiga las circunstancias del hecho.
El vocal del Tribunal de Justicia Departamental de Santa Cruz, Evert Álvarez, fundamenta su decisión en un informe de la Policía que sostiene que supuestamente estas personas fueron aprehendidas al interior de la sede campesina.
La casa de Calvo fue escenario de graves incidentes el sábado pasado, unas horas después de que se levantara el paro. Un grupo de personas rompió vidrios, cortó servicios básicos y pintarrajeo con insultos la vivienda del cívico. Por este hecho ya existe una denuncia penal contra los promotores de la protesta.
UNITEL
Mira también
