Armando C. M., un hombre de 58 años, falleció tras caer y ser alcanzado por una motosierra que estaba encendida. Fue contratado para cortar árboles en el municipio de Cuevo, de la provincia Cordillera (Santa Cruz).
Según relatos de sus familiares, quienes llegaron al lugar con la Policía para levantar el cuerpo sin vida de Armando, ayer, 3 de mayo, él estaba cortando un árbol.
En un momento dado, piso mal, se desequilibró y cayó. Asimismo, encima de él cayó su motosierra encendida. Los elementos se combinaron para la desgracia.
Armando deja a su esposa viuda y a ocho hijos en orfandad. Cuatro de ellos son menores.
El cuerpo fue trasladado hasta la comunidad natal de Armando, Ascensión de Guarayos, donde toda la población se encuentra afligida por el trágico accidente. Este hecho ha sido un recordatorio de lo importante que es seguir medidas de seguridad en trabajos de alto riesgo como la tala de árboles con equipos peligrosos.
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