El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, dejó en manos de la administración de justicia la autorización para que el exjefe antidrogras, Maximiliano Dávila, brinde una conferencia de prensa dede la cárcel de San Pedro, donde permanece hace casi un año.
La defensa del exuniformado presentó un requerimiento y, según el ministro Castillo, serán las autoridades competentes que dispongan si puede o no comparecer ante los medios de comunicación.
“Debemos manifestar que sus abogados han hecho el requerimiento pero serán las instancias correspondientes las que atiendan o rechacen esa solicitud. Esa no es una atribución del Ministerio de Gobierno, el abogado ha acudido a las instancias correspondientes y serán esas las que asuman una determinación”, dijo Del Castillol en conferencia de prensa.
Esta semana, Manolo Rojas, abogado del exjefe policial, informó que Dávila quiere ofrecer declaraciones referidas a la forma en que se lo capturó y el proceso abierto en su contra, por supuesta legitimación de ganancias ilícitas.
“Quiere decir cómo ha vivido este proceso, cómo se han vulnerado sus derechos fundamentales, el fondo del proceso porque detrás de su captura hay personajes que han actuado de forma irregular, que no eran efectivos de la Policía y menos de la Fiscalía”, dijo el jurista.
Dávila fue director nacional de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) en el Gobierno de Evo Morales, antes que este renunciara a su cargo en 2019. Un informe de la DEA lo menciona, junto con un exmayor de la Policía, Omar Rojas, detenido en Colombia y señalado como supuesto jefe del tráfico de cocaína desde Bolivia.
El Deber
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