Una menor de 4 años murió luego de recibir un disparo de su hermana de 3 mientras jugaban con una pistola semiautomática en el condado de Harris, Texas (Estados Unidos). Las pequeñas estaban en un departamento junto a su madre, padrastro y otros tres adultos.
“Parece otra historia trágica de un niño que obtiene acceso a un arma de fuego y lastima a otra persona. Esta vez fue un disparo fatal”, afirmó el alguacil local Ed González.
El oficial insistió en que las armas deben estar almacenadas en sitios donde los niños y niñas no puedan alcanzarlas. “Tienes que asegurarte de ser un propietario responsable de armas. Guarda tus armas en un lugar seguro. Tiene que ser algo más que decirles a los niños que no toquen las armas”, aseguró el guardia.
Lamentablemente, los casos de muertes accidentales han estado en las noticias. Recientemente, un niño de 6 años llevó un arma a la escuela y le disparó a su maestra Abigail Zwerner, de 25 años.
Zwerner, antes de ser gravemente herida, logró que sus alumnos estuvieran a salvo. Ella fue traslada al Centro Médico Regional de Riverside para recibir tratamiento urgente.
En Estados Unidos, el 16% de las muertes accidentales en menores de 13 años surge por confundir las armas con juguetes, según Nationwide Childrens.
La República