El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, quien tomó distancia de las pesquisas que se realizan por el asesinato de tres policías en la zona del Urubó, viajó a Paraguay para participar de un seminario internacional que fue organizado por la Unión Europea (UE).
La reunión internacional fue convocada para compartir experiencias de las políticas de lucha contra narcotráfico en la región, informo la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) de Paraguay, que destacó la presencia de la autoridad boliviana en ese encuentro.
La participación del ministro Del Castillo se produce “en uno de los momentos más críticos por los que atraviesa la Policía Boliviana”, expresaron oficiales de esa entidad al señalar su preocupación por la reacción del gobierno frente al asesinato de tres policías en el Urubó (Porongo).
La autoridad, como en otras ocasiones tras operativos menores, no acompañó al comandante de la Policía, Jhonny Aguilera, para presentar los resultados de las investigaciones sobre el asesinato de tres policías que tuvo lugar el martes 21 de junio en Porongo.
La autoridad publicó un tuit en el que afirma que seguirán investigando el caso; mientras sus detractores políticos y desde el mismo MAS le exigieron “acciones inmediatas” en contra de las personas que ejecutaron a los policías.
La Policía capturó a Misael Nallar y está acusada de estar detrás de la ejecución de tres policías. Aguilera dijo que, cuando se produjo este hecho, este ciudadano “estaba bajo el efecto de bebidas alcohólicas y otras sustancias”.
Aseguró, sin embargo, que ni este sujeto ni los ciudadanos colombianos que acompañaron a Nallar cuando se produjo el crimen tienen antecedentes de narcotráfico. Eso sí, reveló que el triple asesinato se cometió con armas largas de uso militar.
El detenido estuvo casado con la hija de Jesús Einar Lima Lobo, quien el pasado año fue extraditado a Brasil por delitos relacionados con el tráfico internacional de drogas.
La ausencia de Del Castillo también cobró relevancia porque se produce en la víspera del aniversario de la Policía, una entidad que ha sido golpeada este año por al menos cuatro escándalos relacionados con la corrupción.
El Deber
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