Frente a las medidas de presión por parte de los extrabajadores del Servicio Departamental de Caminos (Sedeca) y la postura de la Central Obrera Boliviana (COB), el gobernador del departamento de Tarija, Oscar Montes, explicó que la gran mayoría de los trabajadores de esta institución tenían contratos a plazo fijo y que solo noventa trabajadores están bajo la Ley General del Trabajo, por lo que negó que exista una masacre blanca, sino más bien, recalcó que se respetó el contrato de cada uno de ellos y ahora se da paso a la creación de una nueva unidad para mejorar la atención a las carreteras del departamento.
“Los trabajadores del Sedeca son 90, de los cuales 30 tiene discapacidad, hay muchas mujeres, muchos abogados, muchos auditores. Luego, hay un grupo de trabajadores cuyo contrato feneció el 31 de octubre y otro grupo de trabajadores que su contrato feneció el 31 de diciembre, a todos les mantuvimos sus contratos, acabó su contrato y les renovamos porque entendemos que no se necesita 350 personas, porque las personas que verdaderamente estaban trabajando no pasaban de 80”.
Entre las primeras investigaciones en las oficinas del Sedeca, que realiza la unidad interventora a cargo de la Secretaría de Obras Públicas de la gobernación, se encontró computadoras con toda la información eliminada y varias demandas por despidos injustificados, manejados de pésima manera por la unidad legal de la institución, lo que despertó sospechas sobre el accionar de los anteriores directores y trabajadores de la institución.
“Los trabajadores demandaban permanentemente al Sedeca y de manera arbitraría se fijaban cuánto merecían recibir como sueldo o cuánto merecían de vacaciones y finiquitos. Por darles solo un ejemplo, entre agosto y diciembre del año pasado, cinco trabajadores se llevaron más de dos millones de bolivianos por ese tipo de demandas. Están en el Ministerio de Trabajo, decenas de este tipo de demandas, porque encontraron la manera de recibir mucho dinero”.
La primera autoridad del departamento calificó como acciones políticas las manifestaciones de la COB, que buscarían desestabilizar la gestión de Montes a la cabeza del Gobierno Autónomo Departamental de Tarija: “Hicimos exactamente lo mismo que el Gobierno hizo con Aasana y la Central Obrera no abrió la boca, así que esa doble moral obedece a un posicionamiento político”.
Montes informó también que la nueva unidad responsable de caminos está trabajando con normalidad, sobre todo en las provincias del departamento, debido a que cada subgobernador tiene maquinaria pesada destinada a las carreteras, mientras que, en el caso de la provincia Cercado, se espera cerrar la liquidación del Sedeca para hacer uso de esa maquinaría.
“En cada subgobernación hay aproximadamente 20 trabajadores dedicados al Programa Vial que en estos momentos está funcionando, excepto Cercado porque es la única que no compro equipo pesado, sin embargo, una vez que tengamos el control sobre los equipos del Sedeca, armaremos una unidad vial en Cercado, por lo tanto, los ocho municipios que están bajo nuestra jurisdicción tendrán su propia unidad vial”, explicó.
La autoridad dijo que los profesionales y técnicos que cuenten con un perfil operativo y trabajaron en el Sedeca tendrán las puertas abiertas para ser recontratados en la nueva unida vial que reemplaza a la anterior institución: “En las próximas semanas abriremos una oficina donde todos los funcionarios del ex Sedeca que quieran seguir prestando sus servicios a la Gobernación, a través de un nuevo régimen laboral, tendrán la posibilidad de hacerlo”.
Agencias