“Te voy a despedir”. Como un baldazo de agua fría, una mujer contó su historia en redes sociales en la que reseña cómo la sacaron de su trabajo, en un centro de cuidados para personas mayores, porque colegas suyos se “distraían” con sus fotos y videos en horario laboral, según el reporte del medio argentino Clarín.

La joven contó que se llama Jaelyn, tiene 22 años y es de Indiana (EEUU). En su historia señaló que también se desempeña como auxiliar de enfermería en residencias de la tercera edad.

“He estado siendo auxiliar de enfermería en los mismos cuatro centros desde hace un año y medio”, comentó al respecto. A mediados del mes, según afirmó, surgió un problema en uno de estos lugares. “No sé si reír o llorar ahora”, planteó.

“Te voy a despedir”

Jaelyn reseña que al llegar a cumplir con su jornada apareció una señora, a la cual no había visto nunca y quien sin explicaciones mayores le pidió que la acompañara a una oficina. La joven no se imaginaba lo que venía y, en primera instancia, pensó que le realizarían un test de Covid-19 o algún chequeo de rutina.

Sin embargo, se equivocaba: aquella “señora” se trataba de una presunta supervisora del centro. Y le estaba por dar una mala noticia. ”Entramos a su oficina, cerró la puerta y me avisó: ‘Te voy a despedir’. Entonces, yo le pregunté el porqué”, manifestó Jaelyn. Enseguida, la supervisora le explicó que había descubierto su otra ocupación: se refería a su contenido erótico en una plataforma para adultos.

Y el motivo fue que sus compañeros de trabajo -tanto mujeres como hombres- perdían su tiempo laboral mirando imágenes y filmaciones de Jaelyn, incluso pagaban para verlas, es decir, se suscribían a dicha plataforma.

A raíz de esta situación, la supervisora le informó a Jaelyn que esas “distracciones” no podían volver a ocurrir y por lo tanto la ‘tenía que echar’. Y agregó que le parecía incoherente que no responsabilizara a sus compañeros.

“Su principal razón para despedirme a mí y no a mis colegas fue que ellos necesitaban el empleo más que yo”, declaró en el reporte que fue replicado por diferentes medios.

Unos días después, Jaelyn llamó por teléfono a la supervisora: le exigió que le mandara, por medio de un escrito formal, cuál había sido el motivo exacto de su despido. “Utilizó terminología muy complicada, que no llegué a comprender del todo. Por eso se lo mandé a mi abogado. Pero básicamente, ella puso que yo era ‘una distracción’”, expresó.

En un nuevo clip, la estadounidense aclaró que su principal fuente de ingresos es esta plataforma para adultos y en la actualidad no ‘necesita’ desempeñarse como auxiliar de enfermería para solventar sus gastos.