La actividad sísmica registrada desde el 15 de enero en la localidad de San Lorenzo, en la frontera entre El Salvador y Guatemala, dejó 62 viviendas colapsadas y 719 inhabitables, informó ayer la dirección de Protección Civil.
La institución reportó 1.255 viviendas afectadas, de las que 474 “presentan daños leves” y que se declaró inhabitables 719 “debido al daño que sufrieron y el riesgo que representan” para las familias.
Los datos del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales indican que “continúa la serie sísmica entre el municipio de San Lorenzo, departamento de Ahuachapán, y territorio guatemalteco”.
Detalló que suman 771 sismos desde mediados de enero y que “el origen de estos “es atribuido a la activación de fallas geológicas en la zona y no está asociada con actividad volcánica”.
Apuntó que entre estos 771 temblores se registraron dos “sismos principales” de magnitud 5,3 y 5,1, y que el resto se encuentran entre el rango de magnitud 1,4 y 4,4.
EFE