El diputado evista del Movimiento Al Socialismo (MAS), Renán Cabezas, denunció que observó “prácticas de corrupción”, no sólo en las calles con la actuación de la Policía, sino también en el ámbito de la política, con prebendas y padrinazgo del que forman parte, presuntamente, algunos de sus propios colegas en la Asamblea Legislativa Plurinacional.
El legislador evista sostuvo que dirigentes de organizaciones sociales y legisladores se benefician supuestamente de prebendas y espacios laborales a cambio de ratificar su confianza en el Ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo.
“He visto corrupción aquí en la Asamblea Legislativa, he visto nepotismo y conductas antiéticas. Entonces aquello también tenemos que decirnos, sólo de esa forma vamos a empezar a trabajar mejor, porque si vamos encubrir esto no va a andar bien. La Asamblea Legislativa tiene que ser el ejemplo del comportamiento humano en todo el Estado Plurinacional”, manifestó Cabezas, citado por Erbol.
El diputado efectuó esa reflexión a tiempo de referirse a la corrupción dentro de la Policía y de las prácticas ilegales como la extorsión a conductores en estado de ebriedad, todo ello en medio de carencias para el patrullaje de seguridad ciudadana.
Por ejemplo, dijo que la corrupción en la Policía se da para el ingreso a la Academia Nacional de Policías y la Escuela Básica, donde no se ingresa por temas de capacidad o ética, sino por “padrinazgos y pagos”.
Cabezas reveló que muchos jóvenes le pidieron ayuda para entrar a la Academia de Policías, pero comentó que su recomendación es que estudien y que sólo reclamaría en caso de una reprobación injusta.
Sin embargo, señaló que “hay otros diputados que les ayudan a entrar” a la entidad policial. Sin embargo, evitó dar nombres.
Cabezas aseveró que dirigentes de organizaciones sociales y legisladores se benefician supuestamente de prebendas y espacios laborales para sus allegados a cambio de ratificar su confianza en el Ministro de Gobierno.
Consideró raro que el Ministro de Gobierno no haya sido removido del cargo, a pesar de ser cuestionado por organizaciones sociales y parlamentarios. Atribuyó esa situación a las prebendas que estarían dando para que esos políticos den su voto de confianza a la autoridad del Ejecutivo.
“El ministro (Eduardo del Castillo) en varias oportunidades convoca a algunos diputados para ofrecerles un espacio laboral y, cuando le dan un espacio laboral, tapan su boca, ya no le cuestionan al ministro. Eso es corrupción, eso es coartar el derecho a la libre legislación y al libre pensamiento. Los legisladores, muchos están aquí trabajando condicionados y eso es una lástima”, afirmó.
TOMADO PÁGINA SIETE
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