Por los bloqueos instalados en diferentes puntos de la carretera que une a Santa Cruz con Beni y que este viernes cumplió su quinto día, los habitantes del municipio de Ascensión de Guarayos y Pailón son los más afectados, donde incluso ahora les racionan la venta de combustible y alimentos.
En los tres surtidores de la zona se constató que se entrega un máximo de 50 litros de gasolina por persona, cantidad que se obtiene luego de formar una extensa fila para recargar.
“Ya no hay diésel”, dijo uno de los encargados de la bomba de una estación, que señaló que ya no contaban con este combustible desde el jueves, reportó Unitel.
El presidente cívico de Guarayos, Marcelo Méndez, indicó que hay un desabastecimiento que ya se siente en la población y que fue precisamente la falta de carburantes lo que motivó a que los transportistas formen parte del grupo que se enfrentó a los bloqueadores la tarde del jueves y que dejó siete heridos.
“No hay alimentos porque todavía el bloqueo persiste en Pailón, lamentablemente lo que se está viviendo es muy triste y pedimos que el Gobierno haga algo, en muchas partes de la Chiquitania no ha llegado ni combustible”, dijo el cívico al medio televisivo.
La representante del Comité Cívico de Pailón, Jesica Justiniano, indicó que el bloqueo perjudica a los pobladores y piden al Gobierno dar solución, porque comenzó a haber escasez de alimentos y el precio del combustible se incrementó.
“La población está molesta por el bloqueo, nos preocupa esta situación, llamamos a las autoridades de Gobierno y a las que corresponda a dar solución a este conflicto, porque nos afecta. Si hay compromiso de dar titulación que lo solucionen, nosotros no tenemos nada que ver, pero estamos sufriendo las afectaciones desde ayer se siente la escasez de alimentos y un combustible caro”, manifestó.
Asimismo, en la ciudad de Santa Cruz también se forman filas en las estaciones de servicio para la compra de carburantes, debido a que, por el bloqueo de los campesinos de la Chiquitania, los camiones que transportan diésel dejaron de llegar con la frecuencia habitual, según Fides.
Tomado de Página Siete