A sus 30 años, Selena Gomez sabe bien lo que es estar expuesta a las opiniones de los demás. En Instagram suma la cifra de 371 millones de seguidores y sus fanáticos no suelen guardar sus comentarios. Además, Selena comenzó a estar expuesta al público a sus 11 años, cuando empezó a aparecer en la televisión en el programa infantil y con 15 conoció el éxito como protagonista de la serie.
Los comentarios constantes sobre su físico han contribuido a aumentar la presión a lo largo de su carrera. En reiteradas ocasiones se realizaron comentarios sobre su físico. “A diario escucho, cada día, que no soy lo bastante sexy o guay, así que quise hacer una marca para alentar a todas y cada una de las personas a ser quienes son y para tratar de eliminar toda esa presión no deseada”, reconoció en una entrevista en los últimos años.
El pasado 11 de enero fue la última vez que se enfrentó a este tipo de comentarios. Gomez acudió a los Globos de Oro, nominada como mejor actriz televisiva en una serie musical o de comedia por su papel de Mabel Mora en la serie Solo asesinatos en el edificio, emitida en España por Disney +.
Asistió a la gala celebrada en Los Ángeles acompañada por su hermana pequeña Gracie Teefey. La joven actriz vistió un vestido negro largo, pero sin mangas.
No recibió el galardón, que se llevó Quinta Brunson por Abbott Elementary, pero sí protagonizó un debate en las redes sociales, que ella zanjó compartiendo un directo de Instagram en el coche junto a su hermana en el que decía con una sonrisa “Estoy un poco gorda en este momento porque me divertí durante las vacaciones”, a lo que la pequeña Gracie, de nueve años, respondía entusiasta “¡Síí!”