La emisión de guías de movimiento vegetal no tendrá costo para los agricultores de soya y maíz cuya producción sea menor a 50 hectáreas (ha), informó el Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag).
Esta información fue dada a conocer luego de que el 10 de junio, funcionarios del Senasag se reunieran con representantes de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) y la Asociación de Productores de Maíz y Sorgo (Promasor).
En el encuentro, se trató el contenido de la Resolución Administrativa 102/2022, aprobada el 20 de mayo por el Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras, que establece el Manual de Procedimiento para la Emisión y Fiscalización de Guía de Movimiento Vegetal, el cual ya es aplicado por parte del Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria.
La nueva normativa establece que la emisión de la guía tendrá un valor de Bs 154, que se aplicará para el tránsito interno de granos de maíz y de soya, y que para los otros productos agrícolas el costo se implementará de forma progresiva, mediante resolución administrativa y considerando el grado de crecimiento de producción.
En el encuentro del 10 de junio, el Senasag socializó aspectos de orden legal y técnico que amparan la Resolución Administrativa 102/2022 y los productores ratificaron su rechazo a la disposición, según una carta del servicio estatal enviada al presidente de la CAO, Óscar Mario Justiniano.
El documento precisa que la emisión de la guía “no tendrá costo alguno para el movimiento vegetal de productos de maíz y soya en superficies menores a 50 hectáreas” ni para el transporte de semilla de ambos granos, siempre y cuando esté registrada y certificada por el Instituto Nacional de Innovación Agropecuaria y Forestal (Iniaf).
El Senasag precisa también en la carta que la guía se aplica “solamente para el tránsito interdepartamental y en las rutas y tramos de riesgo próximas a las fronteras”.
Para más de un productor de maíz, que pidieron la reserva de sus nombres por temor a represalias, este nuevo instructivo del Ministerio de Desarrollo Rural es una especie de «impuesto a la producción». Además de desaprobar el costo, reparan en el proceso burocrático que supone la tramitología administrativa y el pago en el banco para obtener la guía.
El Senasag sostiene que la implementación de la guía tendrá múltiples beneficios para el país.
Coadyuvará en la protección de la condición fitosanitaria del patrimonio agrícola del territorio nacional y, por ende, de los productores; garantizará la trazabilidad de los productos de origen vegetal en el país y de los productos con destino a la exportación; permitirá identificar de forma oportuna una emergencia sanitaria o el brote de alguna plaga, para tomar acciones que eviten la diseminación del problema; y mejorará el control del movimiento de productos de origen vegetal para apoyar la lucha contra el contrabando de esa mercadería.
El Deber
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