A más de un año del secuestro de la bebé Daylin, sus padres Wilfredo y Gregoria la siguen buscando. Y es que una noticia reciente reavivó su esperanza de encontrarla.
Recientemente, la policía peruana desbarató una banda que se dedicaba a la trata y tráfico de bebés recién nacidos. Por eso, sospechan que la niña fue víctima de esta red delincuencial y piden que se investigue si hay una relación en estos casos.
«Operaban de la misma forma en que ha sido raptada la bebé Daylin. Nos levanta ciertas sospechas porque es casi el mismo modus operandi», explicó el abogado Abel Loma.
La forma de acercarse a las víctimas era similar, se ganaban la confianza de las mamás, les ofrecían ayuda y luego desaparecían con los menores.
Según los informes de autoridades de Perú, esta banda traficaba bebés desde Cuzco hasta diferentes países de Europa. Se tiene el dato de, al menos, 20 recién nacidos que fueron «comercializados» de esta forma, los precios oscilaban alrededor de los 1.000 dólares y los ofrecían en «catálogos». Incluso algunos eran entregados para ser «ofrendados» a la Pachamama.
«Pedir a la Fiscalía que se pueda tomar algún tipo de nexo con la Policía Nacional del Perú para que se pueda recabar información que nos permita tener algún dato», agregó Loma.
Asimismo, resaltó que una de las detenidas en Perú tiene una apariencia similar con «Camila», la mujer que se llevó a Daylin.
«La policía pudo identificar en el teléfono de esta persona un sinfín de fotografías de menores de edad recién nacidos. Lo que llama la atención es que en este grupo, que es una familia de puro mujeres, una de ellas tiene, aparentemente, ingreso migratorio hacia Bolivia», explicó el abogado en entrevista con El Mañanero.
El jurista explicó que se contactaron con los investigadores peruanos y lograron una autorización para revisar las fotos de niños encontradas en dicho celular. Entonces, planean viajar con la mamá de Daylin para que vea las imágenes.
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